miércoles, 27 de octubre de 2010

Las lagrimas del mico de piedra

.
Hubo una vez un mico de piedra. Era una criatura bella y mágica que vivía en la entrada de un precioso bosque entre dos grandes montañas. Aunque era tan pesado se veía obligado a caminar arrastrada  en el suelo, el mico disfrutaba del paisaje día tras día, soñando como poder brincar de albor en albor para disfrutar del bello paisaje pero desde arriba.
Pero todo aquello desapareció con el gran incendio. Los arboles quedaron reducidos a troncos y cenizas y cuanto animalitos y plantas vivían habían desaparecido, el mico de piedra fue el único que pudo resistir al fuego por su condición, pero el pobre miquito vio aquel desolado paisaje, y se adueño de él  la tristeza y la melancolía y no se resistió y se coloco a llorar.
Lloro y lloro durante minutos, horas y días, con tanto sentimiento, que las lagrimas fueron dando le vida a todo aquello que estaba inerte y el miquito fue bendecido por ese gran amor a la su bosque y fue quitada su capa de piedra y pudo cumplir sus sueños de brincar de albor en albor .



No hay comentarios:

Publicar un comentario